martes, 21 de agosto de 2012

Marcha por la vida, marcha por la supervivencia

¿Oscuridad? Soy la luz.
¿Temor? Soy la valentía.
¿Sumisión? Soy insumisión.
¿Aflicción? Soy la alegría.
Golpe a golpe, te levantas,
te alzas tras cada caída
rebosando tanta fuerza
como agua de escorrentías.
Te recolocas la guardia,
dejas la mirada fija,
asumes tu situación,
contraatacas y esquivas.
Muévete, planta batalla.
Grita, lucha por tu vida,
lucha hasta el fin por ella
y que nada te lo impida.
Aguanta, resiste, avanza,
no hay condena que te inflijan.
Mantente firme y empuja,
que ningún golpe te aflija.
Sabes bien lo que mereces,
manifiesta tu valía,
si sobra, deja tu orgullo,
tu voluntad es tu guía.
Banderas, escudos, himnos,
dioses, ideologías,
políticos y líderes
y tanta superchería.
Corre, recto, hacia delante,
seguir es tu día a día
siempre con gran decisión.
¿Parar, volver? Cobardía.

"Y verás sin duda el resurgir poderoso del guerrero
sin miedo a leyes ni a nostalgias
y lo verás caer y levantarse de nuevo
en la pura bandera de su raza."
Manolo Chinato.

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