domingo, 27 de mayo de 2012

Imagen de amor

Siento en mí un inmenso amor
que crece cálido y fuerte
y a la vez tan delicado,
sólo de pensar perderte.
Mi blanca y tan bella flor,
aquella a quien tanto quiero,
la ilusión por la que vivo
y, de ser menester, muero.
Rosa de mis sentimientos,
amapola bicolor,
hiedra por la que camino
victorioso y con honor.
Jazmín de mis primaveras,
gorrión de mis mañanas,
arcoíris tras la lluvia,
y estrella en noches claras.
Yo quisiera ser tu tierra,
tu manantial de agua calma,
tu sol y tu luz y tu aire
y el alimento de tu alma.
Y mi tierra te dará
la sustancia de mi sangre
y en tu cuerpo brotará
el fruto de nuestra carne.
Y brotará, bello y puro,
y no se marchitará,
florecerá eternamente
y nadie lo pisará.


Poema versionado de Adolescencia de amor (Yo quiero ser tu tierra) del libro Amor, rebeldía, libertad y sangre del gran Manolo Chinato

martes, 15 de mayo de 2012

Seremos el mañana


Qué sabrán las barrigas llenas
de tantos bolsillos vacíos.
Qué sabrán las billeteras
de cómo están los monederos.
Qué sabrán corbatas y trajes
de ropa de mercadillo.
Qué sabrán los que tanto ríen
de los que lloran o se resignan.
Qué sabrán atriles con discursos
de puños cerrados en alto.
Qué sabrán los parásitos
de quiénes toman su alimento.
Qué sabrán los vencedores
de los vencidos sin condición.
Qué sabrán las hienas
de lo que hacen las hormigas.
Qué sabrán los titiriteros
de cómo se sienten sus títeres.
Seremos la silicona
que inopera cada cerradura.
Seremos el cóctel molotov
que prende la Revolución.
Seremos los jardineros
que plantan la semilla del futuro.
Seremos el férreo piquete
que llama a la huelga.
Seremos la densa arena
que para tus engranajes.
Seremos la barricada
que resiste a tu coerción.
Seremos los panfletos
de la contrainformación.
Seremos la palanca
que subvierte el sistema.
Seremos el mañana
que queremos que sea.

jueves, 10 de mayo de 2012

Hasta entonces ondea la esperanza

Me abruma tanto la duda
de encontrarte o no, quizás,
algún día en mi camino
y que te quedes por siempre.
Me inquieta el sinsentido,
pestañear y no verte
o tenerte sólo en sueños
¿y de qué están hechos estos?
Al fin ya lo sé, de ti,
de tus ojos, de tus labios,
de tu piel, tus caricias,
de tu pelo y de tu olor.
Después de tantas caídas
de las que nos levantamos,
de tantos cruces de vías
que no nos perdieron nunca,
alzo mi bandera verde
esperando a que la veas
y al fin poderla bajar.
Coronaré mi esperanza
con un corazón, el tuyo,
y lo tendré por tesoro.
Y si al final no te encuentro,
que no seamos extraños
que por algo llevo tu huella:
Mírame tierna y sonríe,
quiero ver brillar tus ojos
y recordar nostálgico
que algún día me vi en ellos.

martes, 8 de mayo de 2012

Soneto X. Un soneto para dar ánimos

Nunca pares de darme primaveras
que no desistiré en cuidar las flores
que llenarán tus días de colores
y me harán estar por siempre a tu vera.
No me digas que padeces de amores
y todo te sale por peteneras,
que ahora me pongo y barro tus penas
y siembro de tus sueños, los mejores.
Dile adiós para siempre a la tristeza,
recuerda lo traidor que es el destino
y jamás dejes algo por pereza.
Soy quien que te da abrazos repentinos,
quien te anima en tiempos de flaqueza,
la luz que te ilumina el camino.